Con hasta 5 cambios en el 11 titular los de Xavi se impusieron por 3-0 al Villarreal en casa. Dos de Lewandowski y uno de Ansu en la primera parte fueron suficiente para dejar en la lona a los de Unay Emery. Frenkie jugó de pivote defensivo y pese a terminar fundido firmó un gran partido.
Hoy a las 21:00 en el Spotify Camp Nou se ha disputado el Barça-Villarreal correspondiente a la décima jornada de La Liga Santander. El Barça llegaba al encuentro tras perder el liderato de la liga en el clásico frente al Madrid en una semana complicada para el feudo cule. Los Catalanes estaban obligados a ganar este partido si querían recuperar las buenas sensaciones y no desengancharse de la pelea por La Liga. Partido trampa en casa donde los de Xavi recibían a un Villarreal que llegaba con buenas sensaciones.
Respecto a los onces titulares Xavi Hernández optó por un 4-3-3 revolucionario con Ter Stegen en la portería, Sergi Roberto, Marcos Alonso, Kounde y Jordi Alba en defensa. Gavi, Pedri y De Jong en la medular y en ataque Ansu Fati, Ferran Torres y Lewandowski. Ante la sorpresa de muchos el de Terrassa sentó a Dembélé, Raphinha, Busquets y Eric García. Bellerín ya estuvo disponible tras superar la lesión, pero Xavi optó por Roberto debido a la diferencia de ritmo competitivo entre ambos.
Por otro lado Unai Emery sacó un 4-4-2 con Rulli bajo palos, Kiko Femenía, Raúl Albiol, Pau Torres y Pedraza en defensa. Alejandro Baena, Morlanes, Parejo y Yeremy Pino en el centro del campo. Y para terminar Danjuma y Nikolas Jakson como referencias.
Antes del pitido inicial tanto Alexia Putellas (balón de oro femenino), como Lewandowski (trofeo Gerd Müller), como Gavi (trofeo Kopa) exhibieron los mismos frente a 73.261 aficionados y aficionadas que asistieron al Spotify Camp Nou.
El Barça empezó el partido con personalidad, ejerciendo una buena presión alta, bien organizado y robando balones en campo rival. El dominio del centro del campo era culer y las llegadas con más peligro, también. El Villarreal intentó hacer daño al contraataque durante los primeros compases del partido pero la zaga barcelonista supo defenderse bien.
Pasado el ecuador de la primera parte Jordi Alba se ofreció al espacio, incorporándose como extremo por donde siempre ha sido determinante, para posteriormente ponerla rasa al corazón del área dónde el killer blaugrana con un sutil taconazo salvó la presencia tanto de Pau Torres como de Rulli para rematar prácticamente a portería vacía y poner el 1-0. Lewandowski conseguía su décimo gol en Liga en tan solo diez jornadas.
Sin tiempo para asimilar el primero, Gavi rompió líneas frente agarrones continuos y aprovechando la ley de la ventaja, asistió a Lewandowski que, estando de dulce y, desde fuera del área coló un ‘trallazo’ para poner el segundo. El pichichi de la Liga seguía a lo suyo haciendo lo que mejor se le da hacer. Goles.
Una vez se abrió la lata con el primero no pasaron ni siete minutos para que llegara el tercer gol blaugrana. En este, los protagonistas fueron Ferran Torres y Ansu Fati. El primero asistió al segundo tras una buena jugada individual en el interior del área para que el ‘10’ blaugrana empujara el balón al interior de la red. Con este, Ansu le anotó al Villarreal su cuarto gol en enfrentamientos oficiales. Convirtiéndose así su víctima favorita de cara a puerta.
En la segunda parte y con el marcador a favor el Barça siguió dominando el juego e incapacitando a un Villarreal que no encontró la formula para hacer daño a los cules. Frenkie fue sustituido tras un gran partido actuando de pivote y el Camp Nou le reconoció el esfuerzo con una gran ovación. Lo mismo hicieron con el Polaco que ya suma 11 goles en 10 partidos de Liga tras firmar un nuevo doblete y se mantiene pichichi en solitario. Quien no tubo esa suerte fue Piqué que se vio inmerso en pitidos prácticamente al unísono en su ingreso al partido.
Xavi ante la calma del segundo tiempo y el resultado favorable aprovechó para dar descanso a algunos de los jugadores e introdujo a Bellerín para que empezara a coger ritmo competitivo ya que volvía de una lesión que le dejó fuera de los terrenos de juego durante cuatro semanas. Quienes también ingresaron fueron tanto Raphinha como Dembélé, hoy ambos suplentes, a quienes el Camp Nou no echó mucho de menos al igual que a Busquets. Las caras nuevas le sentaron bien al Barça que volvió a practicar un buen fútbol sobre el verde.
Tras el pitido final el Barça volvió a sumar de 3 y a dejar la portería a zero tras perder su primer partido y el liderato frente al Madrid la jornada pasada. Los cules se colocaron segundos en la clasificación con 25 puntos, 8 victorias, 1 empate y 1 derrota. El próximo domingo recibirán en casa a un Athletic de Bilbao en horas bajas.
GERARD LORENTE
Más Que Pelotas - Més que un Canal 