Por fin sucedió. Por fin es oficial que Xavi Hernández se convertirá en el nuevo entrenador del FC Barcelona tras el partido ante el Celta de Vigo. El técnico catalán llega con mucha ilusión de liderar la reconstrucción que necesita el club pero también tiene muchos frentes abiertos que debe afrontar. Analicemos el comienzo de esta nueva era en el club blaugrana. Como dijo Guardiola en su llegada, «Abróchense los cinturones».
LLEGA XAVI, ¿Y AHORA QUÉ?
En esta nueva etapa con Xavi, más que nunca, hay que saber manejar los tempos y los objetivos. Xavi todavía estaba en Arabia cuando desde Barcelona se escribían artículos ironizando sobre la posibilidad de que el Barça consiga ganar el triplete esta temporada gracias a la llegada de Xavi. Debemos alejarnos de estos mensajes que no buscan más que desestabilizar y debemos centrarnos en nuestro objetivo de reconstrucción.
No podemos esperar una mejora enorme en los resultados y en el juego de forma inmediata, pero sí se puede esperar que recuperemos el modelo que un día nos hizo el mejor equipo del mundo. Por fin volveremos a ser reconocibles, ganaremos o perderemos, pero siempre lo haremos con nuestra identidad. Esto, para un aficionado tan peculiar como el culé, lo es todo. Los resultados y los títulos, como ya demuestra la historia de nuestro club, vienen precedidos del buen juego y de ser fieles a nuestra filosofía. Es el único camino.
También podemos esperar que vuelven conceptos tácticos que usaban Guardiola o Luis Enrique, mentores de Xavi. El de Terrassa siempre ha hecho hincapié en la posesión del balón para tener siempre la iniciativa del partido y dominar al rival. Otra buenísima noticia de la llegada de Xavi es que vuelve la apuesta sin complejos por los jugadores de La Masía. Jugadores jóvenes que están demostrando su potencial en el primer equipo como Nico y Gavi y otros que necesitan demostrarlo como Riqui y Collado, pueden verse tremendamente apoyados por la figura de Xavi.

¿QUÉ ES LO QUE HAY?
Muchos cuestionan el nivel de la plantilla actual del FC Barcelona, pero pocos de ellos se detienen a valorarla como lo hace Xavi Hernández. El técnico catalán ya ha alabado en diversas ocasiones a algunos de los futbolistas del Barça. Frenkie De Jong o Dembélé son casos de futbolistas que no todavía no han podido demostrar todo lo que pueden aportar a este equipo y de los que el propio Xavi ha hablado maravillas. Otros como Pedri o Ansu Fati, han sido elogiados por Xavi por el rendimiento que están consiguiendo dar a su edad pero también ha hablado del margen de mejora que tienen si el contexto les favorece.
Más allá de las individualidades, Xavi debe buscar formar un equipo que tenga una idea clara. Una de las tareas más importantes de Xavi es quitarle los complejos a la plantilla y devolverle la confianza. Debe enseñar a estos jugadores a cómo volver a competir dándoles a cada uno el rol y el contexto adecuado dentro del equipo. Si Xavi consigue esto, callará las bocas de los muchos que han criticado a los jugadores por su supuesta falta de calidad.
Estas han sido las primeras declaraciones de Xavi como técnico del FC Barcelona:
«Somos el mejor equipo del mundo, digan lo que digan».
Los culés necesitábamos ya este mensaje por parte de nuestro entrenador. Si Xavi consigue que su mensaje de ilusión cale en la plantilla, estoy seguro de que nos lo pasaremos muy bien.
OPTIMISMO Y PACIENCIA
Esta es una etapa ilusionante pero debemos tener en cuenta que esta es nuestra última bala para tratar de levantar la pésima situación deportiva que el Barça ha estado viviendo en estos últimos años. Venimos de seis años en los que hemos estado poniendo parches y dando más confianza de la que merecían a entrenadores que traicionaban nuestra filosofía.
La apuesta por el proyecto de Xavi debe ser total desde un primer momento. Laporta por fin tiene un entrenador que ha elegido junto a su Junta Directiva y este debe ser el momento de pensar en el corto plazo pero también en el medio y en el largo. Por supuesto que el apoyo y el optimismo del aficionado es clave y más en una situación como esta, pero debemos ser pacientes si hay algún momento en el que este proceso no funciona como esperábamos. Dejemos atrás los ‘ismos’ y unámonos por el bien del club. Tots units fem força.

Comienza una nueva etapa en Can Barça con Xavi sentado en el banquillo. Tras muchos años de sufrimiento, el culé por fin tiene licencia para ilusionarse. Es hora de recuperar nuestro estilo y de levantarse recuperando la filosofía que nos ha hecho grandes. Cojan fuerzas y abróchense los cinturones.
DAVID REDONDO