El FC Barcelona se impuso ayer al Villareal por 1-4 ejecutando posiblemente, el que ha sido el mejor partido del equipo en la era Setién. El partido salió redondo en todos los sentidos, tanto en ataque como en defensa, el conjunto azulgrana plasmó un juego muy sólido ayer en La Cerámica.
Desde el gol tempranero en propia meta del defensor del Villareal, el dominio de los culés fue claro. Griezmann aprovechó su oportunidad como titular para reivindicarse con un golazo exquisito «messiánico» en un nuevo sistema táctico que le vino muy bien al francés. El 4-3-1-2 que ideó el entrenador cántabro con Messi de enganche hizo que Grizou tuviese más libertad de movimiento y le benefició. Ayer pudimos ver a ese Griezmann que realmente vale los 120 millones.
En la medular también pudimos ver a un Sergi Roberto fabuloso, que demostró su gran polivalencia en todas las posiciones del campo. El de Reus ayudó mucho a romper líneas y tuvo gran participación ofensiva. Si ese esquema sigue en activo, el mediocentro interno es la posición idónea para el jugador.
Los laterales también marcaron diferencias en la capacidad defensiva y ofensiva. Tanto Jordi Alba cómo Semedo, ayudaron al equipo a combinar por el exterior y fueron un músculo más para el equipo.
Y destacar también el partido de Suárez, el charrúa llevaba unos cuantos partidos sin dar la talla y ayer fue el killer que ansia esta plantilla. Golazo sublime que ojalá refuerce su aptitud para lo que viene.
Setién estuvo muy acertado desde el banquillo. El santanderino además de dar en el clavo con los cambios, tuvo personalidad y quitó a varias vacas sagradas del terreno de juego dando minutos a canteranos. Notable actuación del cántabro en la jornada de ayer.
Y con el partido ya prácticamente concluido, apareció de nuevo el chico que tanta ilusión desprende, Ansu Fati. El joven canterano salió del banquillo para dar el gol definitivo y sellar una victoria cómoda para los blaugranas.
Gran partido del Barça que sigue con ganas de competir esta liga hasta el final y con un juego mucho más convincente. Si Setién consigue dar la tecla de una vez por todas en este equipo, las aspiraciones pueden ser mucho más altas de las previstas hace un par de jornadas.
DANI PÉREZ
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